Jacinto Montealegre.
En la vida hay ilusiones de parejas hechas en su juventud, que por un motivo u otro no llegan a realizarse cuando ellos hubieran deseado y si se realizan algún día nunca serán como ellos habían soñado. En este trabajo hecho para caligrama deseo explicar lo que le pudo suceder a una de esas parejas que no llegaron a realizar su sueño como ellos deseaban.
14-mayo -2011.
Son las 11 de la mañana, estoy sentado en la
mesa y tengo delante de mí un cuaderno y un bolígrafo, para dejar constancia de
mi viaje a París, terminado ayer. Podía demorarlo, pero tengo miedo de olvidar
las sensaciones y emociones que sentí durante estos siete días, que tantas
veces soñamos Ángela y yo en nuestra juventud.
Día -7-
mayo.
Hotel Kyriad (París) |
Salimos en autobús un grupo de cuarenta y
cinco personas, a las siete de la mañana, con destino a París. El viaje fue monótono
y un poco pesado, llegando a las ocho de la tarde a nuestro destino, al Hotel
Kyriad.
Jardines de Trocadero y Torre Eiffel |
Día-
8- mayo.
Visitamos la Torre
Eiffel, jardines, museos y alrededores de la Plaza de Trocadero. Mirando los
jardines desde el mirador, pensé en ti, Ángela, y en lo mucho que te hubiera
gustado contemplar aquellos jardines con la torre al fondo, como tantas veces habíamos
soñado juntos. Al atardecer, visitamos La Basílica del Sagrado Corazón en
Montmartre, que dicen que es el punto más alto de París, y después recorrimos
varias calles de ese barrio, finalizando en la plaza del Tertre, donde se
agrupan los pintores. Cómo me hubiera gustado estar juntos, para que nos
hubieran hecho un retrato al carboncillo, y después haberlo enmarcado y que
presidiera el salón de nuestra casa.
Día-
9-mayo
El Museo de El Louvre |
El programa para ese
día era visitar Los Campos Elíseos, el Arco de Triunfo, La Plaza de la Concordia
y Los Jardines de las Tullerias, por la mañana, y El Louvre, por la tarde. Creo
que te hubiera gustado todo menos El Louvre, porque sabiendo como pensabas, me
habrías comentado que cómo es que daban tanto valor a unas estatuas estando
rotas. A una le faltaban los brazos, la otra tenía las alas rotas... A otras
les faltaban los dedos de un pie o de la mano. Quizá te hubiera impresionado un
poco la sala de Rubens, pues fue lo que más me gusto, sus pinturas me
parecieron grandiosas.
Día
10- mayo
Galerias Lafayette |
Fuimos por la mañana
visitar varias iglesias, la de San Sulpicio, la Magdalena, el mercado de las
flores de dicho nombre y Nuestra Señora (Notre-Dame) en la cual, después de
visitar la planta baja, subimos a las torres del campanario por una escalera
muy estrecha en la que solo podíamos ir de uno en uno. Mientras ascendía, vino
a mi memoria cuando, de novios, vimos “El jorobado de Notre-Dame”, que tanto te
gustó. Por la tarde visitamos el Teatro de la Ópera y cuando salimos del teatro
fuimos a los grandes almacenes Galerías Lafayette. Cómo hubieras disfrutado,
viendo cuantas cosas bonitas allí había, y me hubieras ayudado a elegir algunos
regalos que compré para nuestros hijos.
Teatro del Chatelet |
Día
11-Mayo.
Por la mañana, anduvimos
por los Campos Elíseos. Vimos el Gran Palacio y el Pequeño Palacio, separados por
la avenida Winston Churchill. Pasamos por el Teatro del Chatelet, donde tantas
veces cantó Luis Mariano, cuyas canciones te gustaban tanto y tarareabas con
bastante frecuencia. Después de comer en un restaurante mediocre, fuimos a
pasear por la orilla del Sena. La mayoría del grupo embarcó para hacer un
recorrido por el río, pero yo preferí pasear por la orilla. Después de andar
largo tiempo me senté en una terraza para esperar al grupo que había embarcado.
Se acercó un hombre tocando el acordeón y sus melodías me recordaron el día en que
nos conocimos bailando, pues eran del disco “Amanecer en París”, de Aimable.
Estanque de los Suizos y el Naranjal |
Día
12-Mayo.
Dedicamos todo a recorrer
Versalles, en dos etapas: el Palacio y el Parque. Empezamos por el Palacio, con
sus salones, como el de Hércules, el de la Abundancia, el de Mercurio, y otros cuyo
nombre no recuerdo, la galería de los espejos, las cámaras del Rey y la de Luis
XV y los gabinetes, el del Chaflán, el del Delfín, el de la Meridiana y el
interior del de la Reina.
Al terminar de
visitar el Palacio, que es enorme, fuimos a recorrer el Parque, con sus
numerosas fuentes, pabellones, gran cantidad de jardines, estanques, miles de
flores de gran variedad y al final de la alfombra verde el estanque de Neptuno
y el Gran Canal. Cuando terminó la visita por el parque aún nos quedaba un
tiempo libre hasta la hora de marchar. Yo me puse a caminar hasta el Naranjal y
el Estanque de los Suizos, donde estuve sentado hasta la hora de regresar, en
ese tiempo comprendí lo mucho que tú hubieras disfrutado cogida de mi brazo
admirando la majestuosidad y esplendor de todos los rincones del palacio, y en
el parque contemplando sus fuentes, sus esculturas, la belleza de sus flores y
aspirando la fragancia de su aroma.
De regreso a casa |
Día
13-Mayo
Emprendimos
el regreso hacia España. El viaje no fue tan monótono como el de ida, porque
estuvimos hasta la hora de la comida cambiando impresiones de lo que habíamos
visto en París. Después de comer la mayoría estaban dormidos o casi, y entonces fue cuando tomé la decisión
de escribir este pequeño diario, porque tengo miedo de que después de algunos
años me falle la memoria y no pueda recordar con exactitud todo lo visto. No
quiero olvidar lo que soñamos y deseamos en nuestra juventud, y así, cuando
pase el tiempo y lea de nuevo este pequeño diario, podré sentir la satisfacción
de haber realizado al fin este viaje, por nosotros tan deseado.